Los servicios de control y gestión de la energía se encargan de racionalizar los consumos en base a los diferentes criterios, como la potencia contratada, tarifas, etc...
Como ejemplo, nombramos los siguientes:
- Desconexión selectiva de cargas eléctricas. Con esto se puede abaratar el recibo de la electricidad (término de potencia), a tiempo que se consigue incrementar la
seguridad de la instalación.
- Programación de la puesta en marcha de receptores cuando se aplica la tarifa más barata.
- Calefacción y aire acondicionado por zonas. De esta forma se consigue un mayor confort, el aprovechamiento óptimo de los recursos y se inhabilita la climatización
dentro de unos horarios y zonas no habitadas. También se puede incorporar el control de contradicción, cuando se abre una ventana, la climatización se desconectará automáticamente,
volviendose a conectar cuando se cierre la ventana.
- Alumbrado exterior en función de la luminosidad y la presencia. Así se evita la conexión del alumbrado cuando haya luz natural y cuando en zonas de acceso
controladas no se detecte presencia.
- Lectura remota de contadores, evitando las visitas domiciliarias.
- Información de cosnumos , costes, horarios de tarifas, etc...
- Utilización de fuentes de energía alternativas ante imprevistos (solar, eólica...)